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El Adiós A
La Diosa De Cuero
Por
el momento todo parecía estar en calma, y luego de promocionar en Estados
Unidos el programa en el cual los locales habían decidido invertir su
capital para darle color a nuestro amado dúo, Diana volvió a enfundarse
en sus "cat" suits para grabar la quinta temporada por las mañanas,
y por la tarde se dedicaba a vestirse de hombre para darle vida al personaje
de Viola en Twelfth Night cuyos ensayos comenzaron el 3 de mayo
de 1966 y el estreno se produjo el 16 de Junio de 1966 (su sueldo: £70
a la semana).
La vuelta a la Royal Shakespeare Company
se trasladó en muy buenas críticas por parte de la prensa (recordemos
que Twelfth Night trata sobre una chica, Viola, que luego de sufrir
un naufragio se viste de chico para conseguir trabajo como criado de un
hombre de quien se enamora, y éste, pensando que es un chico, la envía
a cortejar en su nombre a la mujer que ama, que a su vez, se enamora de
Viola vestida de hombre, ¿entendieron?) La Viola que Diana interpretó
fue creíble como hombre al mismo tiempo que proyectaba los sentimientos
de una mujer.
"...Diana Rigg, como Viola hace un retorno triunfal
a la Compañía que la formó antes de Los Vengadores". Peter Lewis,
Daily Mail, 17 de Junio de 1966.
Al año siguiente Diana continuaría su alianza
con la Royal Shakespeare Company, convirtiéndose en su Artista Asociada.
Pero volvamos al set de Los
Vengadores, donde a pesar de haber conseguido un aumento de sueldo y la
aceptación de ciertas condiciones, Diana percibía hostilidad por parte
de la gente de la ABC británica, y dichas percepciones estaban justificadas,
ya que irónicamente, a pesar de dar vida a la mujer más emancipada de
la televisión, gracias a la cual la serie fue adquirida en Estados Unidos,
para los ejecutivos de la ABC Diana era simplemente una actriz más.
"Ella [Diana Rigg] tenía razón en amenazar con irse.
Era probablemente la mejor exponente de Stoppard, de Shakespeare, de
las tragedias griegas, incluso de comedia ligera. Nunca hubo límite
para su talento y aquí estaba trabajando por una paga miserable. Creo
que en ese momento los ejecutivos de la cadena no tenían idea de lo
que poseían". Patrick Macnee, "The Avengers and Me",
p. 74
Pero los ejecutivos de la ABC llegaron
hasta el extremo de ignorar las opiniones, sugerencias y dudas de Patrick
y Diana sobre cómo mejorar el programa. Simplemente eran requeridos para
grabar sus escenas, hacer entrevistas y promover el programa, sin importar
si tenían compromisos previamente acordados. Lo que ocurriese en sus vidas,
no les interesaba.
"...No pienso ir. ¿Cómo se atreven a venir y decirme
que debemos ir a Alemania en el espacio de un día?". Diana
Rigg, citada por Patrick Macnee, "The Avengers and Me", p.
87
En ese momento Diana sentía que sus únicos
amigos en el set eran Patrick Macnee y su chofer John Taylor. De hecho,
Patrick fue la pieza clave para lograr la permanencia de Diana una temporada
más (es decir, la quinta temporada del programa y la primera a color).
Quizás por este tipo de trato Diana siempre dejó en claro que en realidad
Emma no estaba totalmente emancipada.
A pesar de su agotamiento físico y mental
y de estar absolutamente aburrida por no estar aprendiendo nada, Diana
decidió regresar y grabar los 8 episodios restantes para completar la
quinta temporada. Lo que nadie sabía en ese momento era que mientras Diana
y su agente estaban elaborando las condiciones de su nuevo contrato, los
ejecutivos de la ABC británica ya estaban sugiriendo a la ABC estadounidense
la búsqueda de un reemplazo para acompañar a Steed.
"Debí decirle a Diana: ‘Tú estás pasándola mal. Yo
estoy pasándola mal. Unámonos y hagamos que ésto funcione. Hagamos un
programa tan exitoso que ambos nos olvidaremos de los malos tiempos’.
Pero no lo hice." Patrick Macnee, "The Avengers and Me",
p. 90
El resto es historia: los estadounidenses
dispusieron la contratación de la canadiense Linda Thorson para reeemplazar
a Diana, y como todos sabemos, a pesar de que muchos guiones de la sexta
temporada son excelentes, incluso a veces mejores que los de la anterior,
la magia que reinaba, producto de la química entre Patrick y Diana, había
desaparecido.
Así que el 31 de Agosto de 1967 en los
estudios ITV de Borehamwood, Hertfordshire, Diana dijo adiós a Los Vengadores
y a las 5.20 de la tarde sacó una botella de champagne (su bebida favorita)
para brindar con sus compañeros de trabajo (aunque otras fuentes alegan
que su participación en la serie finalizó 15 días antes del 22 de septiembre,
fecha en que culminaron definitivamente las grabaciones de la quinta temporada).
En Enero del año siguiente Diana fue convocada
nuevamente por el productor de la serie, Brian Clemens, para realizar
un episodio "puente" entre la anterior y la actual "chica
Avengers". Diana se vio obligada a aceptar debido a que su contrato
estipulaba la realización de 26 episodios y sólo se habían filmado 24
episodios en la quinta temporada. Dicho episodio, The-Forget-Me-Knot (No
Me Olvides), resultó extenuante emocionalmente tanto para Patrick como
para Diana, y la tristeza que ambos sentían por el adiós que se acercaba
es evidente a lo largo de todo el episodio
"...Sabía que la iba a extrañar muchísimo. Ella había
sido todo. Su energía. Su sentido del humor. La manera en que peinaba
su cabello después de derrotar a dos o tres hombres de un solo golpe...(...)...
me acostumbré a ver su cara, ¡y a amar esa cara!" Patrick Macnee,
"The Avengers and Me", p.101
El balance de la era Emma Peel tuvo un
saldo más que positivo para Diana: dos nominaciones al Emmy como mejor
actriz dramática en una serie de televisión en los años 1967 y 1968, y
su elección como Actriz del Año en 18 de los países en los cuales se emitía
la serie. Lejos de la cabeza de Diana se hallaba en ese momento la idea
de que el personaje de Emma Peel la acompañaría a lo largo de toda su
vida, incluso hasta el extremo de impedirle desarrollar una carrera en
el cine.
A pesar de haber expresado repetidamente
su preferencia por el teatro, también ha comentado que sus problemas a
la hora de filmar una película son producto de haber aprendido demasiado
bien a actuar para televisión (yo no entiendo mucho de actuación y filmación,
pero los que sí, sabrán a que se refiere). Otro de los obstáculos para
su despegue en el cine, según Diana, ha sido la renuencia de los productores
de cine a contratar a alguien que ha sido una estrella de televisión.
Pero más allá de las pequeñas interferencias
(a mí me parecen pequeñas) que Emma Peel haya podido causar en la vida
de Diana, los beneficios han sido enormes, y ella nunca ha dejado de reconocerlo.
Muchas veces admitió que la fama que consiguió con este personaje en seis
meses, en el teatro le hubiera costado años de trabajo y que jamás se
ha avergonzado de la forma en que logró adquirir fama internacional, pero
al mismo tiempo nunca se arrepintió de haberse marchado.
"La televisión es tan inmediata. A sólo una semana
de haber aparecido en mi primer capítulo de Los Vengadores el 90% del
público ya me reconocía. Una semana después de mi partida, el 90% del
público ya me había olvidado." Diana Rigg, citada por Dave
Rogers, "The Complete Avengers", p.158
El hecho de haber permanecido dos años
al frente de un personaje, a pesar de todos los problemas que existieron,
indica que Diana lo disfrutó más de lo que quiere o se anima a contar.
Quizás sea porque en Emma Peel se esconde mucho de Diana Rigg, más de
lo que ella quiere admitir.
No hace muchos años, Diana fue interrogada
sobre el rol con el cual se ha sentido más identificada, y después de
dar muchas vueltas admitió que Emma Peel se parecía mucho a ella: su forma
de caminar, de presentarse con la gente, de relacionarse con sus compañeros,
etc. Tal vez sea por eso que Diana nunca ha alardeado mucho sobre este
personaje y su importancia en la historia de la televisión, ya que en
gran parte estaba siendo ella misma.
Y si sumamos esta confesión al reconocimiento
que Patrick Macnee siempre ha hecho sobre el hecho de que John Steed es
una extensión de su persona, no es difícil encontrar la causa del éxito
del programa especialmente en esa etapa: dos brillantes actores poseedores
de una química tan grande que les permite dejar de lado los libretos impuestos,
y escribir los propios donde los protagonistas de la serie no son Steed
y Emma, sino Patrick y Diana.
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