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escribe Mackidockie
Este episodio esta plagado de
naturaleza, viva y muerta, pero más que nada muerta, ya que varias
localidades del país anglosajón se encuentran en un estado
de toxicidad tal que toda ave o animal no llegan a su vejez, así
como las plantaciones no llegan a feliz termino. El causante no es otro
que un fertilizante de nombre 'Polvo Silencioso' (¿a quién
se le puede ocurrir un nombre tan ridículo para un fertilizante?)
que en vez de hacer el bien hace el mal (más o menos como el
Superman Bizarro). ¿Y cómo Emma y Steed se iban a perder
semejante "fiesta"?
Emma fraterniza con un observador de
pájaros medio nabo llamado Quince y,¡oh casualidad!, se
"topa" con Omrod y logra que la invite a la próxima
cacería. Mientras tanto Steed visita a la hija del creador de
'Polvo Silencioso', y por cierto que la chica destila veneno por todos
sus poros, debido al trato que recibió su padre antes de morir.
Pero hete aquí que la señorita se encuentra complotada
con Omrod y sus tres secuaces para sacarle dinero al Gobierno a cambio
de dejar de contaminar el país. Por cumplir demasiado bien su
trabajo, Steed termina con un disparo en el brazo, para luego ser auxiliado
por una "bigotuda" y no muy amable Emma (parecía que
tenía más ganas de matarlo que de curarlo). La escena
final se compone de la cacería de perros tan mencionada a lo
largo del episodio, de la cual tanto Steed como "Lady Emma"
(como la llama Steed) forman parte. Ambos son llevados a sendas trampas,
pero sus habilidades ecuestres, mas ciertos carteles de protesta (sobre
todo el que reza: "Abajo con la violencia") les permiten mandar
al 'Polvo Silencioso' a callarse para siempre.
Innumerable es la cantidad de pequeños detalles que se pueden
hallar en este episodio, comenzando con los pajaritos muertos de la introducción,
que como la gente de utileria no podía lograr que se quedaran quietos
en el árbol hasta el momento de su caída, decidieron subirse
a una escalera y tirarlos a lo bestia. Después de este pequeño
incidente, todo es cuesta arriba: primera oportunidad en que alguien esculpe
un busto de Emma y en que Emma se "calza" los bigotes, aunque
más no sea en una alucinación medio rara de un Steed herido
(¡Steed, se me cayó un ídolo, te creía más
pícaro!). Y a propósito del ataque a Steed, si Roger Marshall
quiso impresionar e interesar a la audiencia, definitivamente lo logró
con este giro imprevisto en la historia, y digo imprevisto porque es difícil
imaginar, y mucho más ver, tanto a Steed como a Emma en auténtico
peligro, sabiendo que uno no está en camino para salvar al otro.
Todo puede encontrarse en este episodio: comedia, drama, suspenso, deportes,
política, psicología... ¡hasta travestismo!
escribe Pablo Alonso
Después de dos episodios que, por un motivo u otro, no
llegaban a los estándares habituales, la serie se reencauza en
este muy buen capítulo, escrito (al igual que el siguiente en producirse)
por Roger Marshall, casi siempre calidad asegurada, y dirigido por Roy
"Demasiado hostigado por el teaser de los pájaros muertos"
Baker. La historia va acumulando villanos de a poco, todos bien definidos
y con un motivo propio para confabularse detrás de semejante plan,
además de otros personajes incluso más interesantes, como
el excéntrico-soon-to-be-boleteado-in-a-cruel-way Quince (interpretado
por Aubrey "Consejero de Alex" Morris) y la pobre Claire Prendergast,
encariñada con Omrod (quien le dio contención a ella en
más de un sentido, parece y a su difunto padre para poder
conseguir el "polvo silencioso").
Hay varias escenas memorables. Una es la bizarra alucinación de
Steed mientras Emma le extirpa la bala, al mejor estilo western. Otra
es el encuentro posterior entre Steed y Omrod que va acumulando tensión
en una magnifica combinación de diálogo con acciones físicas,
ya que a medida que las frases se van volviendo más filosas ambos
van cargando sus rifles. Y, finalmente, el desenlace durante la caza del
zorro, con todos los momentos que contiene, en especial cuando Steed,
divirtiéndose, convierte a Juggins quien se la pasa el episodio
siendo lo más repugnante posible y venía de pegarle latigazos
a Emma en cazador cazado corriéndolo con un cartel que reza
"Abajo con la violencia", el cual era llevado por uno de los
manifestantes que protestaban contra la caza.
Pero la escena que no es para nada memorable, y que baja un poco el promedio
final, es cuando Steed es herido de bala. La falta de sangre y la manera
en que Macnee se tapa la "herida" hace que parezca un juego
de indios y cowboys entre Felipe y Manolito más que una serie de
televisión. ¡Guashangüear!
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